Trabajadores de la subdelegación del IMSS realizaron una denuncia en contra de la subdelegada del mencionado instituto, Cielo Patricia Cazares, debido a que obliga a trabajar al personal a pesar de estar enfermos de COVID-19 o presentar síntomas.
Uno de los trabajadores comentó que la situación es deprimente ya que realmente muchos de ellos se sienten muy mal de salud y les cuesta trabajar, sin embargo por miedo a perder su empleo hacen un esfuerzo.
Explicaron que los principales síntomas que presentan son dolores fuertes de cabeza y también de huesos, el cual en ocasiones es insoportable.
Por otra parte también comentaron que tampoco se les proporciona insumos necesarios como gel antibacterial y sanitización de las oficinas.
Terminaron destacando que la subdelegada no muestra ningún interés en ellos ni tampoco cree que realmente estén enfermos.
Cómo respuesta, el Delegado del IMSS en Sinaloa, Rafael López Ocaña declaró:
«Ningún trabajador que tenga COVID-19 debe andar trabajando»
Por último se dijo que ante tal situación se tomarán cartas en el asunto.