La temporada más esperada en la historia de la Liga Mexicana de Beisbol llegó a su fin de manera histórica y dramática. Toros de Tijuana conquistó su segundo título. Lo impensable, lo jamás imaginado en todos los rincones de nuestro país: triunfo de 3-0 en el Estadio Chevron en una Serie del Rey 2021 presentada por G500 que parecía sentenciada tras las victorias de Leones de Yucatán en los primeros tres juegos.
Una afición que hace una semana veía como su equipo cruzaba el país tras caer en los dos primeros juegos y vio por televisión como perdían el primero en el Parque Kukulcán saboreó el triunfo de manera única. Un ambiente único sazonado por esos primeros descalabros.
Por segunda vez en la historia un equipo que cayó en los primeros tres juegos por el título remontó y se quedó con el campeonato. Sucedió en 1971 con Charros de Jalisco y ahora, 50 años después, con Toros de Tijuana.
Una Serie del Rey histórica tan solo por el hecho de que los protagonistas cruzaron el país para enfrentarse. El tesón y el corazón de los astados hizo que estos juegos nunca sean olvidados y vivan para siempre en la memoria de los tijuanenses y de todos los que aman al Rey de los Deportes.
Teddy Stankiewicz se quedó con la decisión. Brilló con su serpentina, ya lo había hecho en el primer triunfo del regreso tijuanense y ahora tuvo labor de 6.0 EL, permitió tres imparables, cero carreras, dio una base por bolas y ponchó a seis.
Los números del lanzador derecho en esta Serie del Rey contrastan con su única en temporada regular en la que tuvo una apertura en la que se fue con la derrota y tuvo un PCLA de 15.43 tras permitir cuatro carreras en 2.1 innings. En Serie del Rey tuvo 9.1 EL, dos victorias, permitió cuatro imparables, dio dos bases por bolas y ponchó a nueve rivales.
Pete O’Brien, de 4-1 con cuadrangular, una producida y una anotada, encendió las tribunas con un jonrón sin gente en base. El inigualable sentimiento de estar arriba en la pizarra en un juego decisivo se hizo presente en la frontera.
La dupla de los Castro se hizo presente en el quinto rollo. Leandro Castro, de 4-1 con una carrera producida, amplió la ventaja con un imparable al jardín izquierdo que remolcó la carrera de Daniel Castro. Previamente, cuando se embasó Daniel Castro, Luis Matos sacó la grúa para retirar a Jake Thompson, quien lanzó 4.2 entradas, permitió cinco hits, dos carreras y retiró a cinco por la vía del ponche y no dio bases por bolas.
En la séptima el aroma a campeón se hizo más presente que nunca. Rodado de Daniel Castro a tercera base y error en el tiro de Alex Liddi permitió que el velocista Isaac Rodríguez llegara de primera al plato para timbrar la tercera carrera del juego.
Cada turno de los toleteros locales era celebrado antes de saber cuál sería el desenlace. El sonido local y los cánticos de los aficionados tuvieron una sincronía absoluta que vivirá en la memoria de todos.
En el último inning, los celulares de los aficionados fueron los encargados de iluminar el diamante. El estelar Fernando Rodney, cerrador de los tijuanenses, fue recibido con llamas de fuego y el Chevron explotó, el título demasiado cerca. La ‘Flecha’ retiró a sus tres rivales, a dos de ellos por la vía del ponche y todos los jugadores ingresaron al terreno de juego para ser ovacionados por la afición.
Efrén Navarro fue elegido por la prensa especializada como el Jugador Más Valioso presentado por G500 gracias a sus ocho carreras producidas, seis de ellas en el Juego 6, un cuadrangular y ocho imparables en 26 turnos.