Ana Lidia y Rosio Osuna son mujeres que durante la pandemia perdieron sus empleos y optaron por comercializar ropa usada, comida y entre otras cosas en una calle de la colonia Santa Teresa.
Las mujeres expresan que durante poco más de tres años, se han mantenido vendiendo en la Av. Munich del fraccionamiento Santa Teresa, de viernes a domingo.
Sin embargo, dicen ser hostigados por inspectores de oficialía mayor.
Mencionan que no les permiten vender como lo venían haciendo por no tener el permiso autorizado en oficialía mayor.
Sin embargo, las comerciantes expresan que se han acercado a las oficinas correspondientes para solicitar dicho documento, y no han sido atendidas.
Además expresan que el trato no les parece justo, ya que un grupo de comerciantes en el fraccionamiento Valles del Ejido acaban de ponerse de manera «clandestina» y los oficiales no han hecho nada al respecto.
«Nos tienen sobre advertencias que si nos ponemos, nos van a retirar, pero si le permiten a otras gentes de otros tianguis (…), estamos solicitando que se nos permita un día»
Rosio Osuna.
Por lo que las mujeres se presentaron en las oficinas del alcalde municipal para expresar su situación y ser atendidas, sin embargo, no fueron recibidas por el alcalde.