El Gobierno de Joe Biden impuso este jueves sanciones a Rusia por su presunta interferencia en las elecciones presidenciales de 2020 y su supuesto papel en el ciberataque masivo de SolarWinds, además de imponer castigos relacionados con las acciones rusas en Ucrania y Afganistán.
Estados Unidos anunció además la expulsión de diez miembros de la misión diplomática rusa en Washington, incluidos integrantes de los servicios de Inteligencia.
Tune in as President Biden delivers remarks on the new sanctions the United States is imposing on Russia. https://t.co/uFJL6hw4qN
— The White House (@WhiteHouse) April 15, 2021
Además, la Casa Blanca acusó formalmente al Servicio de Espionaje Exterior de Rusia (SVR) de haber “perpetrado” el ciberataque masivo que comenzó presuntamente en 2019 y penetró en los sistemas del Gobierno estadounidense y grandes compañías mediante un programa de la empresa SolarWinds.
Hasta ahora, Washington solo había hablado de sus sospechas de que Moscú estuvo detrás de ese hackeo, pero este jueves aseguró que la comunidad de inteligencia está “completamente segura” de que se trató del SVR.
“Al comprometer la cadena de suministro del software de SolarWinds, SVR pudo espiar o alterar potencialmente más de 16 mil sistemas informáticos en todo el mundo”, indicó la Casa Blanca.
En total, Washington sancionó este jueves a 6 compañías rusas por sus actividades de ciberespionaje, a 32 organizaciones y personas rusas por injerencia electoral; y a 8 individuos y entidades por la ocupación rusa de la península ucraniana de Crimea.