La Organización de las Naciones Unidas teme un posible aumento en la trata de personas ante la crisis económica que ha desatado la crisis del COVID-19 sobre todo en migrantes y refugiados.
Las consecuencias económicas de la pandemia pueden conducir a un aumento de la trata de personas y el tráfico de migrantes desde los países más afectados hasta los destinos más ricos”.
La ONUDD, señaló que la pandemia no está deteniendo el tránsito de personas que huyen de conflictos o que buscan mejores condiciones de vida. Así mismo, este organismo analizó los posibles escenarios de las formas en que la crisis puede afectar a medio plazo la trata de personas y el tráfico de seres humanos.
Los cierres y las restricciones también resultan a menudo en rutas y condiciones más arriesgadas, así como en precios más altos, exponiendo a los migrantes y refugiados a mayores abusos y explotación […]Un contexto de restricciones por la COVID-19 aumentando la vulnerabilidad al abuso y la trata puede afectar también a las personas que huyen de las altas tasas de violencia.
La ONUDD concluyó que el impacto económico negativo de la pandemia puede mitigarse mediante inversiones para facilitar la recuperación y proporcionando vías legales y seguras para refugiados y migrantes.
Por: Juan Manuel Nuñez Gonzalez