Confirmado el secuestro de El Mayo Zambada, FGR solicita información crucial

El fiscal Alejandro Gertz Manero ha declarado que el secuestro de Ismael «El Mayo» Zambada en México está comprobado, respaldado por investigaciones que incluyen homicidios relacionados con este hecho. En consecuencia, la Fiscalía General de la República (FGR) ha requerido a Estados Unidos datos específicos sobre el avión utilizado y el piloto que operó la aeronave que transportó al capo junto a Joaquín Guzmán López a un aeropuerto fronterizo.

Necesidad de identificar aeronave y piloto involucrados

Gertz Manero enfatizó la importancia de obtener información detallada sobre el avión que utilizó matrículas clonadas en Estados Unidos, así como la identidad del piloto encargado de la maniobra. Según el fiscal, cualquier aeronave y personal que ingresan al espacio aéreo estadounidense deben cumplir con estrictos requisitos legales, incluyendo la identificación precisa del vehículo y de sus operativos.

Clonación de matrículas y protocolos de entrada

El fiscal cuestionó cómo un avión con matrículas clonadas pudo acceder a un aeropuerto fronterizo de Estados Unidos sin que el piloto fuera detenido ni se siguiera el protocolo correspondiente. Estas irregularidades plantean serias dudas sobre los procedimientos de control y seguridad en las fronteras aéreas norteamericanas.

Resistencia de autoridades estadounidenses a proporcionar información

La FGR ha señalado que, a pesar de la obligación legal, las autoridades de Estados Unidos se han negado a facilitar los datos solicitados. Gertz Manero aseguró que esta información será revelada durante las audiencias de los involucrados, lo que podría arrojar luz sobre las circunstancias que permitieron el secuestro de uno de los líderes del narcotráfico más importantes de México.

Implicaciones legales y procedimentales

La negativa de Estados Unidos a compartir la información esencial sobre el avión y el piloto podría tener repercusiones legales significativas. La FGR plantea interrogantes sobre la falta de protocolos efectivos que impidan el ingreso de individuos y vehículos comprometidos en actividades ilícitas, subrayando la necesidad de una cooperación más estrecha entre ambos países para combatir el crimen organizado.