La posible asistencia de Vladimir Putin a la toma de posesión de Claudia Sheinbaum como presidenta de México ha generado preocupación en la administración de Joe Biden. Esta inquietud se debe a las tensiones internacionales derivadas de la invasión de Ucrania por parte de Rusia, y el papel que Putin ha jugado en este conflicto.
Inquietudes desde Estados Unidos
El gobierno estadounidense considera que la presencia de Putin en un evento tan significativo como la toma de posesión de Sheinbaum podría restarle valor, dada la percepción negativa que tienen sobre el presidente ruso. Estados Unidos espera que México, al comunicarse con Rusia, reitere su postura de apoyo a la integridad territorial de Ucrania, de acuerdo con los principios de la Carta de Naciones Unidas.
La postura de México y la invitación a Putin
México, por tradición, extiende invitaciones a todos los líderes de países con los que tiene relaciones diplomáticas. En este contexto, Sheinbaum justificó la invitación a Putin a pesar de la orden de arresto en su contra emitida por la Corte Penal Internacional (CPI). No obstante, aún no se ha confirmado si Putin aceptará la invitación para asistir al evento.
Compromisos internacionales y posibles implicaciones
Si Putin decidiera asistir, México se enfrentaría a un dilema legal y diplomático, ya que ha ratificado el Estatuto de Roma que dio origen a la CPI, lo que le obliga a arrestar a cualquier persona buscada por este tribunal. Sin embargo, el actual presidente, Andrés Manuel López Obrador, ha descartado la posibilidad de detener a Putin si visita el país.
En su compromiso con la comunidad internacional, México ha extendido invitaciones no solo a líderes de estado, sino también a organismos internacionales de los cuales es miembro, dejando abierta la lista de asistentes a este evento político trascendental.
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