El Gobernador Rocha Moya declaró que los reclamos acerca de que las campañas electorales han sido inseguras, o que la jornada electoral en Sinaloa pueda resultar violenta, son una campaña de la oposición.
Luego de llamados a la autoridad estatal, encabezada por el Gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, para dar a conocer la estrategia de seguridad para la jornada electoral que se vivirá en el país y en Sinaloa el próximo domingo, el secretario de Seguridad estatal, Gerardo Mérida Sánchez presentó el plan de seguridad para elecciones de 2024 coordinado de corporaciones de seguridad en los niveles municipal, estatal y federal.
Este clamor de actores políticos como candidatos abanderados por el frente opositor, conformado por PRI-PAN-PRD-PAS y entes civiles como la Confederación Patronal de la República Mexicana en su capítulo Sinaloa y 13 asociaciones civiles, se inscribe en un panorama nacional donde más de 30 aspirantes y representantes políticos han sido asesinados en el marco del actual proceso electoral. Pero a días de terminar las campañas políticas el escenario se encuentra trágicamente manchado por el asesinato de más de 30 aspirantes a puestos de elección popular, una situación que el Mandatario no puede soslayar.
El lunes, al presentar el Secretario Mérida Sánchez la estrategia de seguridad que se implementará en Sinaloa durante las elecciones, detalló que el plan consta de un despliegue de corporaciones como Policía Municipal, Policía Estatal, Guardia Nacional, Ejército Mexicano, Marina, Protección Civil, Cruz Roja y Bomberos y comprende desde las 20:00 horas del 1 de junio, que cubrirá en su totalidad el 2 de junio, y se contempla que culmine el 3 de junio a las 7:00 horas.
También reveló que antes del mes de marzo, cuando iniciaron las campañas a nivel federal, se formó un grupo especial que depende del grupo Elite de la Policía Estatal para acudir en situaciones de alto riesgo durante la jornada de las elecciones. Este plan obedece a un llamado a tener elecciones tranquilas y pacíficas, pues no se puede hablar de unas elecciones diáfanas y tranquilas cuando en todo México se vive un clima de tensión y de violencia política electoral sin precedentes.