Políticos de distintos partidos están expresando su dolor y condena tras el asesinato de Héctor Melesio Cuén Ojeda, diputado federal electo, quien perdió la vida en un ataque armado en Culiacán, Sinaloa, la noche del jueves. Este trágico suceso ha generado una serie de reacciones que reflejan la preocupación por la violencia en el país y el impacto que tiene en el ámbito político.
Reacciones del PRI
El dirigente nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Alejandro Moreno, fue uno de los primeros en pronunciarse sobre este crimen. Moreno condenó el acto de violencia y exigió a las autoridades que lleven a cabo una investigación exhaustiva para que los responsables sean llevados ante la justicia. Además, expresó su solidaridad con la familia de Cuén Ojeda, quien era un líder destacado del Partido Sinaloense y estaba preparado para integrarse al grupo parlamentario en la próxima legislatura.
Opiniones del PRD
Por otro lado, el presidente nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Jesús Zambrano, también se manifestó sobre el asesinato. Zambrano no solo condenó el acto, sino que además responsabilizó al gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, a quien calificó como el artífice de un crimen político. Según Zambrano, la disidencia política se ha vuelto extremadamente peligrosa en la región y aseguró que aquellos que se oponen al gobierno actual enfrentan riesgos mortales. Aun así, quiso expresar sus condolencias a la familia de Cuén Ojeda y enfatizó que la paz solo se alcanzará cuando se haga justicia, poniendo en evidencia la necesidad de un cambio en la situación de seguridad en el estado.
Un llamado a la justicia
Este lamentable suceso pone de manifiesto la creciente preocupación por la seguridad de los políticos y ciudadanos en México, donde la violencia parece estar en aumento. La exigencia de justicia por parte de los líderes políticos refleja un clamor más amplio en la sociedad que demanda medidas efectivas para combatir el crimen y asegurar el bienestar de todos. Es fundamental que las autoridades tomen medidas concretas para investigar estos actos de violencia y garantizar la seguridad de aquellos que se dedican al servicio público, así como de la población en general.