En una operación sorprendente, la Secretaría de Seguridad de Jalisco ha descubierto una finca en Teocaltiche que servía como depósito de decenas de explosivos y materiales químicos necesarios para su fabricación. Este hallazgo tuvo lugar en el Castillo Santa Sofía, en la colonia El Tanque, y ha generado preocupación en la comunidad.
Durante un patrullaje rutinario, los agentes estatales detectaron a un individuo en actitud sospechosa, quien intentó refugiarse en la finca antes de huir. Una vez dentro de la propiedad, se encontraron 40 granadas modificadas para ser lanzadas desde drones, así como 40 artefactos explosivos caseros, 10 explosivos incendiarios y seis cajas de fulminantes. Además, se incautaron siete kilogramos de pólvora, siete kilogramos de azufre, nueve kilos de clorato de potasio y 20 kilos de metralla, todos los ingredientes necesarios para la fabricación de explosivos.
La manipulación segura de estos materiales requirió la intervención de expertos del agrupamiento Tedax, entrenados especialmente en el manejo de explosivos. Este descubrimiento plantea serias preguntas sobre la seguridad en la región y la posible implicación de grupos delictivos.
Además, esta semana las autoridades estatales desmantelaron tres viviendas utilizadas como centros de monitoreo clandestino, donde se recibían señales de cámaras instaladas en secreto en todo Teocaltiche. Estas cámaras estaban ubicadas en puntos estratégicos y se registraban los movimientos de patrullas y vehículos de las fuerzas del orden en bitácoras encontradas en el lugar.
Aunque no se ha revelado la cantidad exacta de cámaras clandestinas en funcionamiento, este hallazgo resalta la importancia de mantener la seguridad y la vigilancia en la región. No es la primera vez que se descubren cámaras de videovigilancia clandestinas en el estado, ya que hace tres años se confirmó su existencia en Lagos de Moreno, situado a poca distancia de Teocaltiche. Las autoridades continúan investigando este preocupante desarrollo.