El miércoles 1 de mayo, un incidente impactante tuvo lugar en la escuela secundaria Mount Horeb, ubicada en Wisconsin, Estados Unidos. Un menor de 14 años fue abatido por un policía en respuesta a un reporte de un tirador activo en las inmediaciones del plantel educativo.
Según declaraciones del fiscal general del estado, Josh Kaul, el adolescente era sospechoso de portar un arma larga. La intervención de las autoridades se dio tras recibir una llamada que alertaba sobre la presencia de un individuo armado fuera de la secundaria. Aunque no se confirmó si el adolescente disparó, se tomó la decisión de utilizar la fuerza letal para neutralizar al sospechoso, quien no logró ingresar al edificio escolar.
El distrito escolar de Mount Horeb suspendió las actividades por dos días consecutivos como medida de precaución. El superintendente del distrito, Steve Salerno, elogió la rápida respuesta del personal escolar y de los agentes, destacando que las medidas de seguridad implementadas dentro del plantel evitaron una situación potencialmente más grave.
Tanto las autoridades locales como el gobernador de Wisconsin, Tony Evers, expresaron su apoyo a la comunidad escolar durante este momento difícil. El incidente subraya la importancia de la seguridad en las escuelas y la necesidad de estar preparados para enfrentar situaciones de emergencia.