Chilpancingo, Guerrero, 16 de febrero de 2024 – Salvador Rangel Mendoza, obispo emérito de Chilpancingo-Chilapa, reveló en una entrevista con Carlos Loret de Mola para Latinus, que los cárteles de Los Tlacos y Los Ardillos han llegado a una tregua en Guerrero. Según el obispo, esta tregua llega justo antes de un enfrentamiento programado para el 15 de febrero en Chilpancingo.
El motivo detrás de la posible confrontación era el control de al menos 135 nuevas placas de transporte público que las autoridades estatales planean liberar. Rangel Mendoza explicó: «En el fondo, el pleito era por las rutas, tanto de las urvans como de los taxis, y el pleito actual es que van a dar nuevas placas, como 135, y se las estaban peleando los dos grupos».
Aunque no está claro cuánto durará esta tregua, el obispo atribuyó el mérito a «los señores del crimen organizado» por tomar la iniciativa de acordar un pacto. Además, sugirió que la intervención del gobierno pudo haber influido en la decisión, relacionándolo con la reciente solicitud de licencia de la fiscal estatal, Sandra Luz Valdovinos Salmerón.
Rangel Mendoza expresó la esperanza de que este acuerdo sirva como un ejemplo positivo para que otros grupos en Guerrero busquen resolver sus diferencias de manera pacífica. La situación, aunque frágil, plantea la posibilidad de un cambio en la dinámica de la violencia en la región, al menos temporalmente.