Por Nahum Acosta
Ciudad de México. Al concluir la junta del consejo de administración del Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México (GACM) presidida por Javier Jiménez Espriú, secretario de Comunicaciones y Transportes, se determinó continuar con las obras del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) en lo que se culmina la evaluación de lo realizado durante 2018.
En la sesión realizada este domingo en las instalaciones del centro de capacitación de ASA, se determinó que las obras continúen, en tanto el nuevo director general , Gerardo Ferrando Bravo hace la evaluación de lo realizado durante todo el año pasado.
Posteriormente, según el acuerdo del Consejo, se convocará a otra sesión donde se den a conocer los resultado del análisis.
La evaluación podría tardar unas semanas porque el nuevo director general Ferrando Bravo entra en funciones este lunes.
De acuerdo a la minuta de la instalación de acuerdos del nuevo consejo de administración del Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México (GACM) instala el nuevo consejo presidido por Javier Jiménez Espriú y como pro secretario del Consejo a Antonio Canchola y Graciela Márquez Colin, Josefa Blanco Ortiz Mena y Antonio Herrera Gutiérrez.
Simón Levy queda como propietario del Consejo de Administración del Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México a propuesta del secretario de Turismo, Miguel Torruco Márques.
En el acuerdo, el director general del Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México solicitó autorización para el plan de evaluación del proyecto del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) cuyo resultado presentará en las próximas semanas, en tanto se continuarán las obras durante este proceso.
La intención es evaluar el plan estratégico para tomar decisiones sobre las acciones y en caso necesario una actualización del programa estratégico institucional del NAIM.
Tras el anuncio de salida de operación del nuevo aeropuerto se entró en un periodo de incertidumbre que hizo sufrir a los tenedores de los bonos para el financiamiento del mismo y esto se incrementó después de desconocerse una posición oficial por parte de las autoridades salientes.
Existen cuatro series de bonos por un total aproximado por 6 mil millones de dólares a dos series de 10 años de plazo y otras dos series a 30 años. Los bonos bajaron hasta 77 centavos de dólar y la calificación crediticia se redujo cómo contaminación hacia la calificación del gobierno federal y Pemex.
Los bonos emitieron bajo las leyes de New York que posibilita calificar en default técnico en ciertos casos el riesgo más serio para las cuatro series de bonos del NAIM en el anuncio oficial de su cancelación.