A lo largo de las últimas semanas, en las conferencias mañaneras, AMLO y su gabinete han anunciado la entrega de créditos a pequeños empresarios para ayudarles a sobrellevar la crisis que está dejando a su paso la pandemia de coronavirus.
Esta mañana, se le cuestionó sobre aquella clase media que no es lo suficientemente rica para sobrellevar el golpe de la crisis, pero tampoco lo suficientemente pobre para ser beneficiario de estos programas, y sobre la necesidad de crear una reforma fiscal que les ayude a resistir la crisis.
Sin embargo, el presidente declaró que no se está pensando en crear una reforma fiscal, pues dentro del 70% de la población que se tiene planeado reciba un crédito, ya va integrada una franja considerable de la clase media.
“Yo podría decir que casi toda la clase media baja, y por lo menos la mitad de la clase media media, […] Si apoyamos a los de abajo, esto va a significar consumo, la gente va a tener dinero para comprar bienes y mercancías y esto ayuda al 30% restantes, pues muchos se dedican a las empresas, y a los servicios, y esto ayuda” mencionó como manera indirecta de apoyo.
Dijo que el atender a los de abajo no es sólo un asunto de justicia o de humanismo, sino que también garantiza la paz social, lo que ayuda toda la población, incluyendo al 30% de arriba debido a que no hay crímenes, robos o secuestros.
Por último, mencionó que gracias a que se ha logrado tener una buena relación con el gobierno de Estados Unidos, México tiene una enorme capacidad de que la inversión extrajera llegue al país, lo cual generará empleos y el impulso de la industrialización, otra medida indirecta que señaló para ayudar a la clase media.