Los mexicanos somos famosos por nuestro aspecto emotivo y fuerte apego sentimental. Pero más allá de una percepción, nuevos datos generados por la iniciativa Life Test Balance de Motorola ha demostrado que los habitantes de México y en general de Latinoamérica preferimos la actividad sexual que conservar un smartphone.
El reporte llega con motivo de la conmemoración del “Día Mundial del Sexo”, para lo cual Motorola realizó un encuesta que arrojó que el 54% de los latinoamericanos estamos dispuestos a renunciar a nuestro teléfono inteligente por un mes, antes que desprenderse del sexo por el mismo periodo de tiempo. Esa misma cifra entre los mexicanos es de 52% a favor del sexo sobre un smartphone.
El ambicioso estudio de Motorola fue aplicado vía un test en línea a más de 34 mil usuarios tan solo en nuestro país, 76% hombres y 24% mujeres. Más del 60% reconoció tener una dependencia al teléfono celular. En Latinoamérica la prueba se extendió a 126 mil personas de seis países.
Los resultados latinoamericanos contradicen tendencias recientes de dependencia a los dispositivos móviles. De hecho, recientes estudios han demostrado alrededor del mundo que los usuarios de celulares ven afectada su actividad sexual e incluso confiesan que prefieren renunciar al sexo antes que no tener su smartphone disponible. Incluso otro estudio reciente afirma que la gente prefiere renunciar al sexo o al alcohol, antes de privarse de una conexión WiFi.
La prueba consiste en un test que arroja cinco niveles distintos de dependencia al teléfono celular:
- Nivel 1 – Phone-Sapiens: Son quienes emplean su teléfono para cuestiones básicas, como llamar por teléfono. Incluso lo prefieren por sobre enviar mensajes escritos. Su presencia en redes sociales es acotada y no aprovechan todas las facilidades que les proporciona la herramienta.
- Nivel 2 – Phone-Consciente: Son quienes viven con su teléfono y no en él. Hacen un uso del smarthpone para ahorrar tiempo y energía que podrían invertir en cosas que realmente les importen. Valoran sus relaciones personales y encontraron el balance perfecto entre el teléfono y la vida personal.
- Nivel 3 – Phone-Dependiente: Aquí comienzan los problemas para despegarse del aparato. Quienes pertenecen a esta categoría lo usan en sus tiempos libres solo porque está ahí.
- Nivel 4 – Phone-Enamorado: Continuamos el descenso hacia la dependencia. En este caso, el celular jamás está a apagado y siempre está cerca. Suelen asegurar que son multitarea cuando lo que logran es distraerse de múltiples maneras.
- Nivel 5 – Phone-Fanático: Aquí se encuentran las personas que nunca dejan de usar el teléfono. Es lo primero y lo último que ven en el día, y separarse del dispositivo les genera estrés. Es la realidad más negativa de todas, ya que la relación con el celular eclipsa las relaciones personales.
El caso México
De los cinco veredictos posibles, el 40.75% de los mexicanos que hicieron la prueba se encontraron en el Nivel 3, Phone-Dependiente; mientras que nuestros paisanos en el peor nivel, Phone-Fanático, fueron 10%. El tercer lugar lo ocuparon los del Nivel 4, Phone-Enamorado con 21%, mientras que el segundo sitio fueron los Phone-Consciente con el 32.67%.
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