Guerrero.-En medio de la pandemia, una escuela ubicada en la Comunidad de la Cacanicua, municipio de Tlalchapa, Guerrero, es la primera que toma clases presenciales.
Alexis Espinoza, es el profesor que imparte clases en el lugar y es apoyado económicamente por los mismos padres de los menores, ya que de acuerdo a los padres, la SEP lleva más de 6 años sin que envíe a ningún maestro a dicha comunidad, además, los padres señalan que tampoco ha enviado útiles escolares, ni libros de texto gratuitos.
La decisión de que los menores regresarán a clases fue tomada por los mismos padres de estos, sin embargo, lo hacen con las medidas sanitarias correspondientes ya que los alumnos acuden con el uso obligatorio de cubrebocas y son recibidos por el docente con gel antibacterial.
El profesor mencionó que continuar con las clases de los pequeños es de suma importancia para sus padres ya que esta comunidad no cuenta con señal de internet y estos desean que sus hijos continúen aprendiendo para que con el tiempo puedan llegar a ejercer una profesión.
«No tiene mucho que comenzamos, fue como hace dos semanas. Estaban preocupados (los padres) por sus hijos porque no tenían clases, venía el maestro, ponía trabajo y no estaban aprendiendo, pues aquí, la mayoría de padres de familia no sabe leer, no sabe estudiar; entonces, lo que los niños necesitan es un maestro para que ellos puedan aprender a escribir y a leer».
Alexis Espinoza.