Mazatlán, Sinaloa – A medida que avanza la primera quincena de enero, muchos residentes de Mazatlán enfrentan dificultades económicas tras los gastos asociados con las festividades de fin de año. A pesar de recibir su quincena el 31 de diciembre, algunos ciudadanos agotaron rápidamente sus recursos en la celebración de Año Nuevo, dejándolos con escasez de fondos a mitad de enero.
Este fenómeno ha llevado a un aumento en la afluencia a las casas de empeño de la ciudad, según informaron los encargados de estos establecimientos. Durante un recorrido realizado para evaluar el impacto de la llamada «cuesta de enero», se observó un incremento en las personas que recurren a empeñar sus pertenencias como solución para enfrentar la falta de liquidez.
Entre los artículos más frecuentemente empeñados se encuentran dispositivos electrónicos como teléfonos celulares, tabletas, laptops y televisores LED, así como bicicletas, motocicletas y joyería de oro o plata.
Los encargados de las casas de empeño señalaron que muchas personas optan por empeñar sus pertenencias solo por el período restante de la quincena, recuperándolas una vez que reciben sus ingresos nuevamente. El monto solicitado en estos empeños supera los mil pesos, siendo destinado por los solicitantes a necesidades variadas, como gastos escolares, pagos de servicios básicos o adquisición de alimentos.
Se espera que este escenario de dificultades económicas perdure hasta mediados de febrero, momento en el que la afluencia a las casas de empeño tiende a disminuir. La situación refleja los desafíos financieros comunes durante el periodo postnavideño y destaca la importancia de la planificación presupuestaria para enfrentar la cuesta de enero.
