Desaparición de Juan Luis Osuna Pérez en Mazatlán
El pasado 8 de octubre de 2024, Juan Luis Osuna Pérez desapareció en Mazatlán bajo circunstancias alarmantes. Según informes, individuos armados irrumpieron en su residencia ubicada en el departamento de trabajo, privándolo de su libertad mientras descansaba. Este hecho fue registrado por las cámaras de seguridad de los vecinos, proporcionando evidencia crucial del incidente.
La desaparición ha generado preocupación en la comunidad local, ya que Juan Luis era conocido como un ciudadano sin antecedentes problemáticos. La falta de avances en la investigación ha incrementado la incertidumbre y el temor entre sus allegados.
Familia Busca Respuestas y Justicia
Martha Linarte, esposa de Juan Luis, ha manifestado su determinación para encontrarlo. En declaraciones, enfatizó la necesidad de una búsqueda justa y exhaustiva, subrayando que Juan Luis no tenía conflictos conocidos y sospechan de su vinculación con personas equivocadas. La familia ha solicitado el apoyo de la justicia para esclarecer los hechos.
Desde la denuncia presentada en la Vicefiscalía Regional Zona Sur, la familia no ha recibido actualizaciones, lo que les ha llevado a emprender una investigación propia. Con la colaboración de vecinos, amigos y conocidos, buscan desentrañar el paradero de Juan Luis y las circunstancias de su secuestro.
Perfil y Vida de Juan Luis
Juan Luis Osuna Pérez es un padre de familia dedicado a la venta de productos de limpieza. Originario de Culiacán, se trasladó a Mazatlán en busca de mejores oportunidades para sus dos hijas. Su ausencia ha repercutido significativamente en la dinámica familiar, ya que él era el principal sustento económico.
Descrito como una persona de complexión robusta, Juan Luis presenta tatuajes en piernas y brazos, además de una perforación en la ceja. Su familia ha recorrido un largo trayecto entre Culiacán y Mazatlán con la esperanza de encontrarlo sano y salvo.
Respuesta de las Autoridades
La Fiscalía General del Estado ha declarado que el caso está siendo manejado por los agentes del Ministerio Público. Sin embargo, no han proporcionado detalles adicionales, catalogando la información como de carácter reservado. Esta falta de transparencia ha generado críticas sobre la eficiencia y prontitud de las autoridades en el manejo de casos de desaparición.
La ausencia de información concreta ha obligado a la familia a mantener una postura proactiva en la búsqueda, enfrentando una situación cada vez más complicada mientras esperan respuestas oficiales.