Declaraciones sobre la política automotriz y la fabricación interna en Estados Unidos
El presidente estadounidense, Donald Trump, anunció desde la Casa Blanca que “no quiero autos de Canadá o México (…) Quiero que las empresas automotrices construyan aquí”. La afirmación se realizó durante una conferencia en la que se hizo énfasis en la necesidad de reorientar la producción automotriz hacia el territorio nacional.
Durante el encuentro, el mandatario utilizó un lenguaje directo, señalando que el traslado de fábricas y la construcción de plantas en suelo estadounidense responden a un objetivo claro. El discurso destacó la intención de revertir la tendencia de instalar instalaciones de manufactura en países vecinos, lo que fue enunciado como parte de cambios estructurales en la política industrial.
Estrategias en la industria automotriz y cifras de inversión en manufactura nacional
Durante el mismo evento, junto con el secretario de Defensa, Pete Hegseth, se informó que “4 billones de dólares están llegando de las compañías automotrices”. Esta declaración pone de relieve las inversiones previstas por el sector automotriz, que, según el presidente, evitarán que dichas compañías fijen su producción en México o Canadá.
El mandatario subrayó que la reubicación de plantas en el extranjero, particularmente en México, se llevaba a cabo a gran escala, lo cual se contrapone con la situación actual en el país, caracterizada, según sus palabras, por desempleo y fábricas vacías. La data presentada pretende evidenciar un cambio en la estrategia de la industria, orientado hacia un fortalecimiento de la manufactura interna.
Reubicación de plantas y el caso de Honda en Indiana
Una parte relevante de la conferencia fue la mención de que Honda construirá una planta en Indiana, describiendo al estado como “un gran estado y un lugar muy inteligente para construir”. La información resalta el interés de algunas empresas automotrices por aprovechar incentivos y ubicaciones estratégicas en territorio estadounidense.
Se indicó que esta decisión forma parte de un plan más amplio en el que diversas compañías planean instalar sus plantas en Estados Unidos. Este cambio en la ubicación de inversiones surge en un contexto donde se busca fortalecer la capacidad de producción del país, mediante la reorientación de la industria automotriz y la consolidación de la manufactura local.