Desde hace algunos meses, los vecinos de la colonia Insurgentes en Mazatlán han expresado su creciente preocupación por la contaminación del arroyo Jabalines. En el pasado, este arroyo era hogar de peces y diversas especies de garzas que se alimentaban en sus aguas. Actualmente, lo que predomina es un fuerte hedor a drenaje que ha comenzado a invadir las viviendas cercanas.
Impacto en la Vida Diaria
Los residentes de las colonias colindantes con el cauce del arroyo han notado que la peste es particularmente intensa durante la madrugada, llegando incluso a dificultar la respiración. Este problema ha convertido lo que antes era un recurso natural en un foco de protestas y preocupación para la comunidad local.
Preocupación por el Medio Ambiente
Es de conocimiento común entre los vecinos que la causa de esta contaminación parece estar relacionada con la gestión de aguas residuales. Existe un consenso de que la gerencia responsable ha estado vertiendo aguas negras al arroyo, intensificando esta práctica a lo largo del año. Los residentes se preguntan qué entidad debería ejercer sanciones y por qué se permite que la situación continúe deteriorándose.
Interrogantes Sin Respuesta
La comunidad se encuentra en una posición de incertidumbre, con muchas preguntas que aún no han sido respondidas. Se preguntan quién será responsable de sancionar y regular estas acciones que están afectando no solo el entorno local, sino también la salud pública y el equilibrio ecológico del área.
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