Fofo Márquez, conocido por su actitud desafiante y polémica en redes sociales, ahora se enfrenta a un giro dramático en su vida al ser vinculado a proceso por feminicidio en grado de tentativa. En una audiencia realizada en Naucalpan, Estado de México, Márquez expresó su temor por permanecer en prisión preventiva, manifestando que preferiría morir en la silla eléctrica que vivir en el penal de Barrientos.
El hombre, anteriormente conocido por su arrogancia, se mostró abatido, afirmando: «Mi cabeza tiene precio, temo por mi vida, no quiero morir en la cárcel». Además, Márquez pidió perdón a la víctima y a las mujeres presentes en la audiencia, mostrando un cambio inesperado en su comportamiento.
En un momento de desesperación, ofreció hincarse y dejar que todas las mujeres presentes en la sala lo patearan, una declaración que fue recibida con incredulidad por muchos, especialmente debido a sus declaraciones pasadas llenas de soberbia: “Famoso, poderoso, millonario, con buen cuerpo, o sea, neta, soy Dios; conmigo nadie se puede comparar, no hay ser humano más perfecto que yo… soy poderoso, soy intocable”.
