En una triste noticia que ha conmocionado a la comunidad artística y a los amantes del arte en general, el reconocido artista plástico mazatleco, Antonio López Sáenz, ha fallecido a los 87 años de edad. Su sobrino, Víctor Manuel López de la Paz, compartió la noticia del deceso, informando que el artista partió tranquilo mientras dormía en su hogar.
Antonio López Sáenz será recordado como un auténtico cronista pictórico de la vida del viejo Mazatlán, habiendo capturado con maestría la esencia de los siglos 19 y 20 a través de sus obras caracterizadas por figuras redondas y tonos suaves en color pastel. Apodado cariñosamente como «Toño» por sus amigos cercanos, su legado perdurará en las calles y en la historia de esta ciudad costera.
La contribución artística de López Sáenz no solo fue un deleite visual para los sinaloenses, sino también un testimonio histórico de un tiempo pasado. Sus obras lograron plasmar la cotidianidad y el encanto de Mazatlán en su máxima expresión, estableciendo un vínculo entre el presente y el pasado.
Aunque su partida deja un vacío en la escena artística local, el impacto de sus creaciones seguirá vivo, recordando a todos la riqueza de la identidad cultural de Mazatlán y la pasión con la que Antonio López Sáenz trabajó para capturarla en sus lienzos y esculturas.