El cuerpo sin vida de Jairo, el pequeño de dos años cuyo fallecimiento se atribuye a su padrastro, Jorge Alberto «N», ha sido entregado a sus familiares para recibir sepultura cristiana. La información fue confirmada por el Vicefiscal de la zona sur de Sinaloa, Jesús Arnoldo Serrano Castelo, quien destacó que el proceso fue gestionado y completado el pasado viernes.
La carpeta de investigación sigue en curso, con entrevistas a testigos y familiares para obtener más información sobre el trágico suceso. El Vicefiscal informó que la madre del menor está siendo tratada como testigo en este momento, mientras se continúa el proceso de integración de la investigación.
El homicidio tuvo lugar el 7 de diciembre, cuando Jairo ingresó a la Cruz Roja de Mazatlán. Serrano Castelo reveló que los esfuerzos para localizar al presunto responsable están en marcha, con colaboración entre autoridades de distintos estados.
Por el momento, se mantiene la reserva de detalles específicos sobre el delito para evitar interferencias en la investigación en curso. La comunidad espera respuestas y justicia en medio de esta lamentable tragedia.