En un comunicado reciente, Salvador Rangel, obispo emérito de la Diócesis de Chilpancingo, anunció que no presentará ninguna denuncia a pesar de haber salido recientemente de un hospital en Cuernavaca, Morelos.
Investigación en curso
Aunque las autoridades de Morelos han ofrecido diversas líneas de investigación sobre cómo llegó Salvador Rangel al hospital, aún no se ha llegado a una conclusión. Inicialmente se manejó la teoría de un secuestro exprés, pero la Comisión Estatal de Seguridad Pública ha descartado esta posibilidad.
Decisión por motivos de salud
El obispo emérito ha explicado que su estado de salud no favorable le ha llevado a tomar la decisión de no presentar denuncias. Al salir del hospital, Salvador Rangel no ha hecho declaraciones y ha pedido comprensión a los medios, además de expresar su perdón hacia quienes le han causado daño y agradecer la ayuda de las autoridades.