Ciudad del Vaticano – El Papa Francisco fue sometido esta mañana a una operación de hernia abdominal en el hospital Gemelli, en Roma, la cual culminó sin complicaciones, según informó el Vaticano. El servicio de prensa de la Santa Sede comunicó a los periodistas que la intervención duró aproximadamente tres horas y se llevó a cabo sin contratiempos.
La decisión de realizar la intervención quirúrgica se tomó debido al empeoramiento de los síntomas que presentaba el Sumo Pontífice, informó el equipo médico del Vaticano encabezado por Matteo Bruni. El pontífice argentino, después de dirigir la audiencia general en la Plaza de San Pedro, fue escoltado al hospital Gemelli bajo protección policial y llegó al mediodía.
La operación consistió en una laparotomía y cirugía plástica de la pared abdominal con prótesis, realizada bajo anestesia general. La laparotomía implica la apertura del abdomen y se llevó a cabo para tratar una hernia incisional que causaba síndromes suboclusivos recurrentes, dolorosos y cada vez más graves, explicó Bruni en un comunicado.
Cabe destacar que el Papa Francisco ya había sido hospitalizado en el hospital Gemelli en julio de 2021, cuando se sometió a una operación del colon. En esa ocasión, se le extirpó una parte del colon debido a una dolencia. Asimismo, en marzo de este año, también fue ingresado en el mismo hospital por una infección respiratoria que requirió tratamiento con antibióticos.
Después de la operación de hoy, el Papa Francisco se quedará en la décima planta del hospital Gemelli, en la misma habitación que utilizó el Papa Juan Pablo II en varias ocasiones. Además de la hernia abdominal, el pontífice padece dolores crónicos de rodilla que le dificultan el desplazamiento y, en ocasiones, debe utilizar una silla de ruedas o un bastón.
La salud del Papa ha generado especulaciones sobre una posible renuncia en el pasado. Sin embargo, en declaraciones recientes, el Papa Francisco afirmó que actualmente no está considerando renunciar debido a su estado de salud. A pesar de sus problemas de salud, el Sumo Pontífice tiene planeados viajes a Lisboa, Mongolia y Marsella en los próximos meses.
El Papa Francisco es constantemente monitoreado por un equipo médico tanto en el Vaticano como durante sus visitas al extranjero. Su historial clínico incluye una pleuresía grave en su juventud, que requirió la ablación parcial de un pulmón cuando tenía 21 años. A pesar de los desafíos de salud que ha enfrentado, el Papa continúa con su labor al frente de la Iglesia católica y mantiene una agenda activa.
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