En días pasados los diarios internacionales The New York Times, The Washington Post, Wall Street Journal y El País publicaron notas con una temática similar, acusaron a las autoridades mexicanas de esconder miles de muertes por coronavirus en comparación con las presentadas por la CDMX.
Bien, pongamos en contexto, analicemos y desmenucemos la situación. Más allá de las acusaciones hacia el gobierno mexicano por falsear información, lo que salta a la vista es la fecha en la que aparecen las notas (día pronosticado para presentar el pico máximo de la curva de contagio) la sincronía con la que fueron publicadas y al mismo tiempo cuáles fueron los canales de difusión utilizados para dispersar la información: personajes ligados a administraciones anteriores y sujetos con aspiraciones políticas que están cobrando notoriedad. Las 4 notas fueron publicadas el 8 de mayo en el transcurso de la mañana y se haciéndose tendencia en Twitter de inmediato, y más rápido aún surgieron los cuestionamientos sobre los antecedentes de algunos de sus autores.
El más golpeado fue Azam Ahmed a quien se le vincula con Claudio X. González (quién retuiteó la nota a las 7:40 am) considerado como uno de los opositores extremos de López Obrador. ¿Por qué viene a colación el vinculo de Ahmed con González y la relevancia de su retuit?, pues porque él fue uno de los primeros en dispersar la nota a través de su cuenta en Twitter. Como antecedente y para visibilizar el vínculo, el 30 de agosto apareció en el Times una nota que parece ser material propagandístico para impulsar la imagen de él como un símbolo anticorrupción en México. ¿Quién escribió la nota sobre González? Exacto, Azam Ahmed; aparte que no es un secreto que el Times en el último año (2019) ha desplegado una serie de notas en contra de López Obrador y su gobierno.
En del reportaje del 8 de mayo, Ahmed no presenta ninguna prueba documental sino que la nota está basada sólo en conjeturas, “angustiados funcionarios” e “información confidencial”, “hospitales”, “pacientes” y “personas”; nombres genéricos para designar a sujetos los cuales no se puede comprobar su existencia. Para rematar el tono amarillo del texto afirma que “varios médicos” dijeron que muchos de los pacientes que no son aceptados por la saturación de los hospitales “mueren” buscando un hospital que los atienda. La única referencia que hace a un nombre es al de Giovanna Ávila quien trabaja en el Hospital Belisario Domínguez. Habría que comprobar si ella existe, en caso de que así sea, se tendrían que acreditar sus credenciales como médico y sobre todo, si Ávila lee esta nota sería adecuado que ratifique lo que Ahmed dice que dijo y proporcione pruebas que sustenten cualquier afirmación que ella pudiese haber hecho
A éstas notas se le puede dar sin problema alguno la lectura de un ataque coordinado por “alguien” interesado en seguir mermando la imagen ya no solo de AMLO, sino de todo el gobierno federal de México en un claro intento de descalificar el trabajo de MORENA rumbo a las elecciones de 2024. Estos intentos, se suman a los de otros personajes de derecha en México que están ligados al mismo objetivo; desestabilizar, modificar y adueñarse del discurso a través de la generación de polémica, controversia y desinformación para dirigir el rumbo político del país.
El que se cuestionen tanto las cifras como comunicados oficiales emitidos por el gobierno es sano (y necesario) ya que no debemos ni podemos aceptar una información como verdadera sólo por el hecho de haber sido otorgada por las autoridades; pero en igual medida debemos cuestionar la calidad de las investigaciones publicadas en estos 4 medios internacionales, analizarla y generar un dictamen propio acerca de la situación.
Aclaro, NO SOY FAN de Hugo López-Gatell no obstante, cruzó el pantano sin mancharse; la ecuanimidad y la forma de encarar la situación (y cada una en las que ha sido atacado) fue (y ha sido) excelsa.
En resumidas cuentas y a título personal, si estas notas responden a intereses de determinados grupos políticos o bloques opositores al gobierno de México habiendo dinero de por medio para su publicación y no a un cuestionamiento por la transparencia de la información emitida sería una verdadera lástima que medios con tal prestigio y trayectoria histórica se prostituyan de esa manera. Como usted mi querido lector ya lo ha de sospechar, a mí este asunto me huele a chayote con cueritos de rana ¿Usted qué piensa querido lector?; si usted también percibe ese olor, lo espero pronto por aquí.