La noticia de la salida del hospital de Daniel Bisogno después de semanas de internamiento por una severa infección pulmonar llega como un alivio tanto para su familia como para sus seguidores. Pati Chapoy, su compañera de trabajo, fue quien dio a conocer esta noticia mediante una publicación en Instagram, marcando un momento de esperanza en la difícil travesía de salud que el conductor enfrentó. Bisogno, conocido principalmente por su rol en el programa «Ventaneando», fue hospitalizado inicialmente por problemas hepáticos el 8 de febrero, lo que eventualmente se complicó con una infección pulmonar.
Complicaciones y Momentos Críticos
Durante su estancia en el hospital, Bisogno pasó tres semanas en terapia intensiva, enfrentando momentos críticos que incluyeron ser intubado debido a dificultades para respirar por sí mismo. Los médicos diagnosticaron encefalopatías hepáticas severas, un indicativo de que su hígado ya no podía filtrar toxinas de la sangre eficientemente, y exceso de coagulación. A pesar de los esfuerzos por mejorar su condición, hubo momentos en que tuvo que ser puesto en coma para estabilizar su salud.
Superación y Pérdida Familiar
El 23 de febrero marcó un punto de inflexión, con Bisogno mostrando signos de mejora al ser extubado y trasladado a terapia intermedia. Desafortunadamente, en medio de este proceso de recuperación, su madre, Araceli Bisogno, falleció debido a secuelas de COVID-19, lo cual añadió una capa adicional de emocionalidad y complejidad a su situación. A pesar de las circunstancias, se informó que Bisogno pudo recibir la noticia acompañado y con apoyo psicológico.
La historia de Daniel Bisogno es un recordatorio de la fragilidad de la salud y la importancia del apoyo familiar y profesional en momentos de crisis. Su lucha y eventual recuperación resaltan la capacidad de resiliencia ante adversidades personales y de salud. Ahora, en la comodidad de su hogar, Bisogno se enfrenta a un nuevo capítulo en su vida, marcado por una recuperación física y emocional.