Confirmación del hallazgo en Culiacán y descripción de la víctima
Durante la tarde del domingo 23 de febrero de 2025, se reportó la presencia de un cadáver en un predio baldío ubicado en las inmediaciones de Valle de Amapas y el fraccionamiento Capistrano, al sur de Culiacán. La ubicación, cercana a una zona invadida, contribuyó a la complejidad de las diligencias iniciales.
La víctima, aún sin identificar, presentaba una complexión delgada, tez morena clara y aparentaba tener aproximadamente 23 años. Su atuendo incluía pantalón negro, camisa de botines con figuras blancas, gorra, tenis negros y un reloj, detalles que fueron consignados en los primeros reportes del suceso.
El descubrimiento del cuerpo se realizó tras recibir una denuncia a través de las líneas de emergencia del 9-1-1, lo que permitió que el operativo policial acudiera de manera inmediata al lugar. La verificación por el personal de la Policíaca Estatal Preventiva confirmó la magnitud del incidente en la zona.
Procedimientos y protocolo de intervención en la escena
Ante el hallazgo, los elementos en el lugar establecieron un perímetro mediante cinta amarilla, lo que facilitó el control y el aislamiento de la zona. La intervención se efectuó siguiendo los protocolos establecidos en situaciones de evidencia, evitando la contaminación del lugar de los hechos.
Posteriormente, se solicitó la asistencia de la Dirección General de Investigación Pericial para iniciar los trabajos de recolección de pruebas en el área. La coordinación entre los cuerpos intervenidos permitió que los protocolos de investigación se aplicaran de manera rigurosa y trazada.
Inicio de diligencias y traslado al Servicio Médico Forense
En el escenario del suceso, agentes de la Fiscalía General del Estado procedieron a ejecutar las diligencias pertinentes para esclarecer los hechos. El operativo incluyó la toma de declaraciones y la recopilación de evidencias en el lugar, cumpliendo estrictamente con las normativas vigentes.
El cadáver fue debidamente retirado y trasladado al Servicio Médico Forense, donde permanecerá bajo custodia del Ministerio Público hasta ser identificado legalmente por sus familiares. La cadena de custodia se mantuvo en todo momento para salvaguardar la integridad de las pruebas.
