Los filántropos presuntamente fueron enviados por los hijos de Joaquín «El Chapo» Guzmán y construyeron una escuela en la colonia Bicentenario.
La única condición es que ningún niño o niña se quede sin estudiar, entregaron computadoras, pantallas, zapatos y uniformes. Cabe resaltar que esta es una de las zonas más pobres de Culiacán.
El equipo de Luz Noticias acudió al lugar y realizó el siguiente artículo en entrevistas:
Esmeralda, una de las instructoras de dicha escuela manejada por los propios vecinos, fue quien detalló como llegaron los apoyos.
«Vieron varias notas que salieron en Luz Noticias y en los medios, ellos se acercaron, gracias a Dios llegaron a mí, pues la verdad muchísimas gracias, Dios los bendiga por haber llegado, que me hayan formado parte de este proyecto porque, la verdad, lo estábamos buscando desde hace mucho; estábamos pidiendo el apoyo para televisiones, estábamos buscando pues el apoyo porque teníamos planeado esto, no en esta magnitud, lo pensábamos hacer más pequeño».
«No habíamos conseguido la ayuda y pues gracias a Dios se dio ahora con el internet y con la televisión y el Internet, pudimos agrupar a más niños porque eran muy poquitos a los que les ayudábamos a estudiar».
-¿Qué dicen los padres de familia? ¿contentísimos?
«Están bien agradecidos porque la mayoría de ellos trabajan en el basurón y aquí vienen y dejan a los niños», expuso.
Quienes más emoción mostraron con las nuevas instalaciones fueron las niñas y los niños que están aprovechando la escuela o, ya que tenían miedo a reprobar el año por no estar siguiendo las clases en línea como la mayoría de sus compañeros.
Aunque ellos desconocen quien les ayudó a construirla y mucho menos el contexto, se sienten agradecidos porque finalmente tienen un espacio para aprender.
«Ahora si ya voy a la escuela».
-¿Contento? ¿qué dicen tus papás.
«Que bien, no sabía casi leer y pues ya voy a la escuela yo, aquí la maestra me está enseñando en la escuela».
-¿Qué estás aprendiendo aquí en la escuela?
«Leer y escribir y todo», dijo un pequeño de tan sólo 7 años.
«Estoy feliz, porque antes no podía y ahora si puedo (estudiar), le quiero dar gracias a toda la gente que nos ayudó a hacer esta escuela», expresó una pequeña de 9 años
Fuente: Luz Noticias