La diputada española Cayetana Álvarez de Toledo marcó una postura crítica hacia la estrategia de seguridad del presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador, específicamente contra su política de “abrazos, no balazos”. Durante su participación en la Feria de las Ideas 2024 en Puebla, Álvarez de Toledo, quien también es historiadora y periodista, no solo cuestionó la efectividad de dicha política, sino que también animó a la sociedad mexicana a defender la democracia en su país. Su crítica se suma a un coro de voces tanto nacionales como internacionales que han cuestionado la capacidad del gobierno mexicano para combatir eficazmente al crimen organizado sin comprometer los valores democráticos.
El Desafío de la Complacencia Gubernamental
Álvarez de Toledo señaló directamente la complacencia del gobierno mexicano como un factor que facilita la expansión y el fortalecimiento de las organizaciones criminales. Para ella, la política de “abrazos, no balazos” no solo ha fallado en reducir la violencia, sino que ha contribuido a un aumento del número de jóvenes que se integran a estas organizaciones delictivas. Esta crítica resalta una preocupación profunda sobre las políticas de seguridad que, lejos de combatir, parecen coexistir con la criminalidad, afectando directamente a la estructura social y política del país.
Llamado a la Acción y Defensa de la Democracia
Además de su crítica, Álvarez de Toledo hizo un llamado a la acción, enfatizando la importancia de la valentía política y la rebeldía juvenil como herramientas clave en la lucha contra el crimen organizado. Su mensaje es una invitación a no solo cuestionar las estrategias gubernamentales, sino también a comprometerse activamente en la defensa de la democracia y el estado de derecho. Esta visión pone de manifiesto la necesidad de una sociedad civil fuerte y participativa que pueda exigir y colaborar en la creación de políticas de seguridad eficaces y respetuosas de los derechos humanos.
