Aumento de la tierra ociosa en Sinaloa por la escasez hídrica
En el estado de Sinaloa, la superficie de tierra sin sembrar ha incrementado significativamente durante el ciclo de otoño-invierno.
Esta situación se atribuye principalmente a la limitada disponibilidad de agua para el riego, lo que dificulta la implementación de cultivos planificados. Según declaraciones de líderes agrícolas, la falta de recursos hídricos ha obligado a los productores a reducir la extensión de sus terrenos cultivables.
Marte Vega Román, presidente de la Confederación de Asociaciones Agrícolas en el Estado de Sinaloa (Caades), destacó que la superficie ociosa es alarmantemente alta. Los agricultores expresan su preocupación ante la imposibilidad de utilizar las tierras autorizadas para sembrar, especialmente para el cultivo de maíz, que es el preferido y con mayor demanda en el mercado local.
Impacto de la limitada siembra de maíz en la agricultura sinaloense
La plantación de maíz en Sinaloa ha quedado muy por debajo de las expectativas para el presente ciclo agrícola. De las 295 mil hectáreas autorizadas, menos de 100 mil han sido efectivamente sembradas. Esta reducción es un reflejo directo de las dificultades enfrentadas por los agricultores para garantizar el riego adecuado de sus cultivos.
Vega Román señaló que esta disminución en la siembra de maíz es especialmente preocupante, ya que es un cultivo fundamental para la economía agrícola de la región. La escasez de agua no solo afecta la productividad, sino que también limita las opciones de los productores, quienes se ven obligados a considerar otros cultivos que requieren menos recursos hídricos.
Estadísticas oficiales sobre la siembra de cultivos principales en Sinaloa
Según informes del Comité Estatal de Sanidad Vegetal en Sinaloa (Cesavesin), se han establecido aproximadamente 80 mil hectáreas de maíz, 70 mil hectáreas de frijol y 62 mil hectáreas de garbanzo. Estos números reflejan una clara desviación del plan inicial de otoño-invierno, que contemplaba la siembra de 490 mil hectáreas en total.
La considerable reducción en la siembra de maíz contrasta con la relativa estabilidad de otros cultivos como el frijol y el garbanzo, que requieren menos agua para su desarrollo. Esta tendencia ha sido anticipada por los agricultores, aunque la magnitud del impacto sobre el maíz ha superado las expectativas iniciales.
Factores determinantes de la baja siembra de maíz en Sinaloa
La escasez de agua emerge como el principal factor limitante para la siembra de maíz en el estado. Vega Román enfatiza que la existencia de altos niveles de agua en los embalses de las presas locales podría mitigar este problema, facilitando el riego necesario para los cultivos.
Además de la falta de recursos hídricos, las dificultades en la obtención de financiamiento adecuado han exacerbado la situación. Sin un apoyo financiero robusto, los agricultores encuentran aún más desafíos para implementar estrategias que compensen la escasez de agua, lo que resulta en una reducción significativa de la superficie cultivable para el maíz.