Datos del ataque con drones y explosivos en Culiacán
El 3 de abril de 2025, fuerzas federales y estatales se vieron sometidas a un ataque mediante explosivos lanzados desde drones mientras aseguraban un inmueble en los límites de Itaje, en Culiacán, Sinaloa. La acción, presuntamente perpetrada por integrantes del crimen organizado, constituye un ejemplo más de la violencia que se ha venido registrando en la región.
El incidente dejó al menos dos policías estatales heridos, según reportes preliminares, aunque la verificación oficial de estos datos aún está pendiente. La estrategia empleada por los agresores, que involucró el uso de drones, ha generado inquietud en torno a la creciente sofisticación de estos ataques.
Operativo de seguridad y coordinación interinstitucional en el sector oriente
En respuesta a los hechos, autoridades de los tres niveles de gobierno establecieron un operativo de seguridad en el sector oriente de la ciudad. La medida involucró la coordinación de fuerzas federales y estatales, lo que refleja los protocolos de emergencia aplicados en situaciones similares en zonas con presencia del crimen organizado.
El despliegue simultáneo de varios cuerpos de seguridad evidencia la intención de contener rápidamente cualquier posible escalada. Sin embargo, la efectividad de estas acciones es objeto de análisis, pues la estrategia adoptada se enmarca dentro de respuestas tradicionales ante incidentes de esta naturaleza.
Atención médica y respuesta inmediata ante el incidente
El Departamento de Sanidad de la Defensa activó unidades de emergencia, incluyendo ambulancias militares, para acudir al lugar y atender a los heridos. Esta respuesta inmediata buscó estabilizar a los policías lesionados, a la vez que se intentaba controlar los efectos del suceso en la zona.
Hasta el momento, no se han informado detenciones relacionadas con el ataque, lo que genera interrogantes sobre la eficacia de las investigaciones en curso. La ausencia de capturas ha invitado a un análisis crítico de la movilización y coordinación entre las distintas dependencias, considerando la complejidad del escenario de violencia.
El operativo y la atención médica desplegados reflejan la aplicación de mecanismos de respuesta urgentes ante incidentes en contextos de alta tensión, sin que se haya logrado sin embargo un esclarecimiento inmediato de todos los elementos derivados de este suceso.
