En las recientes elecciones presidenciales de Venezuela, que se llevaron a cabo el 28 de julio, Moscú y Beijing fueron de los primeros en reconocer el triunfo del oficialismo. A pesar de que la oposición presentó cifras diferentes y publicó las presuntas actas con resultados desglosados, Rusia y China felicitaron al presidente Nicolás Maduro por su victoria, aunque los veedores internacionales no pudieron confirmar completamente el proceso electoral. Estos países, junto con Irán y otros, han mostrado un apoyo incondicional al gobierno de Maduro.
Relaciones Estratégicas con Rusia
La relación de Venezuela con Rusia es de carácter estratégico, especialmente en el ámbito militar. Desde el cese de exportaciones de armas de Estados Unidos en 2006, Rusia se ha convertido en un aliado militar clave para Venezuela. Este vínculo se ha fortalecido a través de la compra de armamento ruso, visitas de flotas militares rusas a Venezuela y un consistente apoyo diplomático en el ámbito internacional. En el contexto actual de la guerra en Ucrania, Rusia ve en su relación con Venezuela un importante refuerzo para su presencia en América Latina.
Intercambio Económico con China
China, por su parte, mantiene una sólida relación económica con Venezuela, siendo su principal socio comercial. China importa una variedad de productos venezolanos, principalmente derivados del petróleo, y exporta una amplia gama de manufacturas al país. Además, Venezuela ha recibido más préstamos de China que cualquier otro país en América Latina, con un enfoque significativo en inversiones del sector energético. Estas relaciones económicas no solo benefician a Venezuela, sino que también permiten a China fortalecer su presencia en una región estratégica, desafiando así la influencia tradicional de Estados Unidos.
