Principalmente, aclaró que su gira tenía que ver con la supervisión de un camino muy importante que comienza en Badiraguato y atraviesa la Sierra Madre Occidental, el cual beneficiará a más de 100 comunidades marginadas.
El presidente dijo que no pretendía darle la espalda ni ignorarla, pues una de las cosas que más le duele, es no poder saludar a todos en sus giras o inclusive abrazarlos, independientemente de quienes sean sus familiares, pues por su trabajo, aunque no quiera, a veces le tiene que dar la mano a delincuentes de cuello blanco.
Sobre el saludo de mano cuando se le cuestionó por la sana distancia, AMLO afirma que en éste caso si la pasó por alto, pues le parecía una falta de respeto tratar a la señora de lejos, «por humanidad» pues dice también, tener sentimientos.
Repecto a la carta de la cual se hizo polémica, explicó que en ella la señora Loera de 92 años le pide poder ver a su hijo, pues tiene más de 5 años sin tenerlo cerca y no quiere irse sin volver a verlo, a lo que el presidente anunció que ayudará en el trámite con cuanto esté en sus manos.
Pero debido a que los reporteros fueron muy insistente en el tema de la carta, López Obrador dijo que para nuestra tranquilidad, ésta carta se hará pública hoy en el transcurso del día, pues ni la señora Loera ni él, tienen nada que esconder.