El 3 de marzo de 2024, en un partido emocionante y controversial del fútbol mexicano, las Águilas del América mostraron su superioridad ante el Atlas al aplastarlo con un marcador de 5-1. A pesar de un temprano gol de Eduardo Aguirre que adelantaba a Atlas, América logró remontar el marcador antes del descanso a 2-1, gracias a un gol de penal por parte de Henry Martín.
En la segunda mitad, la superioridad de las Águilas fue aún más evidente, con goles de Javairo Dilrosun, Alejandro Zendejas y otro gol más de Henry Martin, estableciendo el marcador definitivo en 5-1.
Sin embargo, a pesar de la contundente victoria de América, hubo controversia en torno a la actuación del Sistema de Revisión Arbitral (VAR). Un incidente específicamente problemático implicó a Diego Valdés, de origen chileno, quien pareció manipular el balón con la mano antes de un centro que resultó en el remate de Henry Martin y un penal marcado por mano del jugador peruano Anderson Santamaría. Según las reglas del fútbol, este tipo de acción se considera accidental y no debería ser motivo para validar un gol.
Este partido se llevó a cabo en medio de tensiones luego de un encuentro previo entre América y Cruz Azul, en el cual América tuvo cuatro goles anulados en una decisión también controversial. El VAR ha sido objeto de críticas y debates en el fútbol mexicano y mundial, y este partido sirvió para avivar aún más esas controversias.
El fútbol es una parte integral de la cultura mexicana, y el América es uno de los equipos más populares y exitosos del país. Sin embargo, estos incidentes de arbitraje han provocado frustración y descontento entre los fanáticos y han llevado a cuestionar la eficacia y precisión del VAR en el fútbol mexicano. A pesar de estos contratiempos, el América continuó mostrando su dominio y habilidad en el campo, proporcionando a los fanáticos una victoria contundente y un juego emocionante.