Altos funcionarios estadounidenses, encabezados por el secretario de Estado Antony Blinken y el secretario de Seguridad Nacional Alejandro Mayorkas, se dirigirán a México en un esfuerzo por obtener mayor cooperación en la reducción de cruces fronterizos. Este movimiento se produce en medio de la creciente presión sobre el presidente Joe Biden, quien enfrenta críticas por su manejo de la situación en la frontera sur de Estados Unidos.
La Casa Blanca busca el respaldo de México en varias áreas, incluido el traslado de migrantes al sur, el control de los ferrocarriles utilizados por migrantes y la implementación de incentivos para disuadir los viajes a la frontera. Estas discusiones se producen después de que la falta de consenso sobre la política fronteriza impidiera a Biden asegurar fondos significativos antes de fin de año.
Históricamente, Estados Unidos ha buscado la colaboración de México para frenar los flujos migratorios hacia su frontera sur. Sin embargo, ambos países enfrentan desafíos similares, ya que el aumento de migrantes supera sus recursos limitados. La migración irregular, impulsada por condiciones deterioradas en los países de origen, ha llevado a un desbordamiento de los recursos federales y estatales en EE. UU.
Con la frontera sur acercándose a un «punto de ruptura», las conversaciones entre los funcionarios estadounidenses y mexicanos abordarán medidas urgentes para restablecer la operatividad de los puertos de entrada clave. La presión adicional proviene de la reciente llamada entre Biden y su homólogo mexicano, donde ambos líderes coincidieron en la necesidad de medidas coercitivas adicionales.
Mientras tanto, en México, miles de migrantes, principalmente de América Central y del Sur, están en un largo viaje hacia Estados Unidos. La capacidad de detención y los vuelos de repatriación limitados complican la gestión de las autoridades estadounidenses ante el aumento de migrantes. Más de 11,000 migrantes esperan en el norte de México, mientras líderes comunitarios señalan la necesidad de vías legales establecidas por la administración Biden para abordar la situación.