En un oscuro y preocupante giro de acontecimientos, Culiacán, Sinaloa, ha sido testigo de una serie de homicidios ocurridos en un corto período de tiempo. En tan solo veinticuatro horas, cinco personas han sido encontradas sin vida en distintas ubicaciones de la ciudad, generando una creciente inquietud entre los habitantes.
El primero de los terribles hallazgos ocurrió en la prolongación de la avenida Álvaro Obregón, cerca de la comunidad del Ranchito. Los transeúntes quedaron conmocionados al descubrir el cuerpo sin vida de un hombre joven, de unos treinta años de edad, con complexión robusta y tez blanca. Este individuo fue hallado esposado y con el rostro cubierto de cinta adhesiva, presentando impactos de bala. Lo que más preocupa a las autoridades es que el hombre no portaba ninguna identificación, lo que dificulta su identificación y las posibles razones detrás de este atroz acto.
En otra parte de la ciudad, en la salida del fraccionamiento Lomas de San Isidro Dos, un joven motociclista fue víctima de un mortal ataque. El asesinato ocurrió mientras el joven circulaba por una de las avenidas, y su cuerpo fue encontrado sin identificación, sin que hasta el momento se tenga mayor información sobre los responsables o el posible motivo detrás de este crimen.
En un tercer incidente, un grupo de rastreadoras encontró el cadáver en estado de descomposición de una persona del sexo masculino cerca del fraccionamiento Portalegre. Las autoridades de la Fiscalía General del Estado se presentaron en la escena para recolectar las evidencias y trasladar el cuerpo al Servicio Médico Forense, en un esfuerzo por esclarecer las circunstancias de este perturbador hallazgo.
Por si fuera poco, la mañana del lunes pasado, en la salida sur de Culiacán, fueron descubiertos los cuerpos de dos hombres. Ambos estaban esposados con las manos a la espalda y con los rostros cubiertos, y junto a ellos se encontró una alarmante formación: una pirámide de pastillas de fentanilo. Se presume que uno de los fallecidos puede corresponder a un joven previamente reportado como desaparecido, proveniente del campo pesquero del Castillo, en el municipio de Navolato. La identificación de las víctimas está siendo cotejada con las huellas y datos de familiares para obtener más información sobre sus identidades y posibles motivos detrás de estos trágicos sucesos.