El estado de Sinaloa enfrenta una situación crítica con respecto a sus reservas de agua. Actualmente, las presas del estado están al 14.6 por ciento de su capacidad de conservación, lo que genera incertidumbre sobre la posibilidad de establecer un próximo ciclo agrícola.
En el mes de julio, las lluvias han sido un 60 por ciento menores de lo esperado, afectando principalmente los valles y no las cuencas de las presas, que es donde más se necesita el agua. Ramón Alberto López Flores, gerente técnico del Organismo de Cuenca Pacífico Norte de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), informó que la situación actual no garantiza la seguridad hídrica para el sector agrícola.
Comparado con 2023, las presas tienen un déficit de 1,750 millones de metros cúbicos y, respecto a la media histórica de los últimos 29 años, el déficit es de 2,680 millones de metros cúbicos. Aunque las recientes lluvias de julio han incrementado el nivel de las presas en un 3.5 por ciento, sólo cinco de las doce presas en Sinaloa superan el 20 por ciento de su capacidad de conservación.
La sequía en Sinaloa no es un problema aislado; otros estados también enfrentan la falta de agua, afectando la producción de alimentos. El Gobierno del Estado y Federal han implementado programas de estimulación de lluvias mediante el bombardeo de nubes, pero estos esfuerzos han tenido resultados limitados hasta ahora.
Para asegurar un ciclo agrícola completo y la estabilidad económica de Sinaloa, conocido como «El Granero de México», se necesita alcanzar al menos 8 mil millones de metros cúbicos de agua en las presas.